A primeros de marzo, y tras el bombardeo durante meses de que había el esqueleto de un T-Rex, al final nos decidimos ir a verlo.
Y francamente, merece la pena. Pensaba que era más la caperucita que el lobo.
Poca cosa puedo decir de este esqueleto, no se si original o una copia, pero que es espectacular y te haces una idea real de como eran.
Muy diferente de lo que nos enseñan en películas como Jurasic Park o similar, en el que lo pintan como un monstruo de casi 3 pisos de altura. No, no es tan grande, pero la imponente masa de carne y la hilera de dientes, no quita de que miedo, tenía que dar y mucho. El mismo miedo que nos da actualmente el encontrarnos de cara con un león hambriento.
Ese miedo que te paraliza y la mente te dice, “Good Bye, babe!!”.
La proporción se puede ver en la foto en la que posa mi mujer.
También habían reproducciones de las huellas dejadas por uno vivo hace millones de años.
Hasta un holograma en 3d del nacimiento de un pequeño T-Rex.
Aparte de la sección del T-Rex, que aunque pequeña para el “bombo y platillo” que se le ha hecho, muy instructiva, interesante y casi imprescindible de ver, también están las diferentes zonas ya habituales.
Los Saltarines del fango, siempre me llaman la atención.
En “El Bosque Inundado”, la parte favorita nuestra y, creo, de la inmensa mayoría de los visitantes asiduos, como siempre la parte de los peces amazónicos disecados es espectacular, y ver una piraña de gran tamaño, impone.
Por lo menos a mí, que bañarme en un rio amazónico lleno de estos pececillos, como es el Approuague, había que hacer un acto de fe para meterte en él.
Otro de los amigos de la zona amazónica, el caimán.
Y ya dentro de la zona del inmenso acuaterrario, el hacer fotos interesantes, no se libra nadie.
En este “pequeño” acuaterrario, también podemos encontrar ofidios.
Ranas lanza.
Aves.
Kapibaras.
Y una pequeña migala de al más de 10cm de largo.
La reproducción de la zona selvática es muy realista, por lo menos de lo que recuerdo.
En el acuaterrario, visto desde el exterior, podemos ver algún que otro pequeño caimán
Y aislada del resto de peces, una manta venenosa.
Saludos.
Salva Rosselló.
Red de Rol
via Armand du Rosselló
March 26, 2018 at 04:03PM
