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| La última versión de Aquelarre es de lo mejor que he visto en rol con permiso de mi querido Warhammer, aunque si os soy sincero, ne veo incapaz de dirigir partidas más largas que una o dos sesiones. |
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| ¡Nooo, habéis matado al Chino Cudeiro! |
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| Foto compartida por EDGE en instagram |
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| Libros que comparten ilustración de portada |
Este proyecto consiste en la descripción de un lugar de fantasía. Normalmente con la intención de usarlo como ambientación para juegos de rol. Una ambientación es el lugar donde se sitúan las historias, es decir, el entorno que sirve como trasfondo. Por lo tanto, Dyss Mítica es una ambientación para juegos de rol de fantasía.
Dyss es un ser vivo, un mundo consciente con capacidad de percepción y dotado de inteligencia. Un mundo que es capaz de alterar su morfología a voluntad. Se trata de un mundo consciente donde los sueños de sus criaturas conviven con los suyos forjando una extraña realidad. Esa realidad, la realidad tangible, es creada por el propio mundo.
Los seres que habitan sus tierras intentan medrar y armonizar con éste, intentando desvelar el misterio que se esconde tras sus, supuestos, caprichosos cambios. Lo irónico es que, en muchas ocasiones, la naturaleza de esos cambios no sólo proviene de sus pensamientos sino que también los provocan los sueños de sus propios habitantes.
Por esta causa, el mundo crea a los “Imagos”, manifestaciones tangibles de todos esos sueños, y una representación de todos sus pensamientos y creencias.
En cuanto a su forma, Dyss es un mundo plano. Visto desde su parte cenital se asemeja a una elipse que se haya roto en sus extremos formando una espiral. El mundo, al girar, se va disgregando, rompiéndose en su borde exterior en fragmentos
más y más pequeños. Esto es debido a que su borde externo marca el límite en el cual Dyss es capaz de seguir manteniendo la coherencia de la realidad y, por lo tanto, su estructura. Por esta causa, el mundo en esas áreas comienza a degradarse, tornándose intangible.
En Dyss la realidad existe mientras el mundo sea capaz de imaginarse a sí mismo. El límite de esa capacidad señala el comienzo del fin del mundo.
El mundo habitado está formado por dos continentes. El Continente Central, una tierra adecuada para la vida donde Dyss trata de mantener encerradas, a fin de protegerlas, a las criaturas del mundo; y el Continente Periférico, límite del mundo conocido que, rodeando al central, se extiende en todas direcciones hasta los límites de la realidad. El Continente Periférico está en su mayor parte inexplorado, y sus tierras son muy peligrosas para las criaturas mortales.
Diferentes realidades alternativas conviven en Dyss, corriendo paralelas a lo largo de lo que se denomina: “El Árbol del Tiempo”. Un esquema que permite llevar la cuenta del tiempo en este mundo.
El Árbol del Tiempo es una representación del flujo de los acontecimientos y de las diferentes realidades. A través de accesos de origen natural que surgen en el mundo llamados “Encrucijadas”, es posible visitar esas realidades si se tiene la habilidad suficiente y la suerte de poder encontrarlas. Dyss se solapa también con otros mundos en pequeñas áreas a través de las “Fronteras”, por lo que visitantes y exploradores de otros lugares pueden explorar sus tierras haciendo uso de estas vías de paso.
Dyss es y sirve de antesala a un mundo utópico conocido como “Lavondyss”, en otros lugares llamado “Avalon” y en otros “El Paraíso”, entre otros muchos nombres. La utopía de una existencia perfecta. Este lugar es un tipo de Imago creado por Dyss que representa al “Mito Supremo”. La idealización hecha realidad del mayor anhelo que poseen todas las criaturas vivientes: “Encontrar el mundo perfecto donde poder ser felices hasta el fin de la eternidad".
(Disponible antes del 10 de noviembre)
Mapa General (6000 x 4385) de la región interior o Continente Central
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| Una muestra de las láminas que podrás encontrar en el pase de firmas a precios ridículos. |
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| Ilustración de Mark Molnar |
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